La forma más efectiva para alcanzarlas es estableciendo cuáles son nuestros objetivos y fijando un tiempo límite para lograrlos, así como prever posibles retos que vamos a enfrentar para cumplirlos.
Compartimos algunos consejos que te pueden ayudar a iniciar tu plan de ahorro:
- Determiná el monto a ahorrar: el ahorro debe ser medible, realista y oportuno. Establecé cuál es tu meta y el plazo que tenés para cumplirla, de esta manera sabrás el monto que debés aportar mes a mes.
- Iniciá cuanto antes: para muchas personas, ahorrar no es una prioridad, sin embargo, es una práctica fundamental para tener una buena salud financiera. Reservá una pequeña cantidad de tus ingresos cada semana o cada dos semanas hasta llegar a tu meta.
- Elegí el producto de ahorro que mejor se ajuste a tus necesidades: por seguridad, se aconseja mantener los ahorros en un banco. Seleccioná un producto a la vista, por ejemplo, una cuenta de ahorro tradicional o un ahorro programado, como la Cuenta Futura de Scotiabank. También podés optar por productos de inversión si tenés más capacidad de ahorro y objetivos a un plazo más largo. Podés encontrar el detalle de las opciones que te ofrecemos aquí.
- Utilizá el dinero solo cuando sea necesario: resistí la tentación de disponer de este, de forma total o parcial, para otros gastos que no estén relacionados con el objetivo de tu ahorro.
- ¡Seguí ahorrando!: así darás pasos importantes hacia la libertad financiera. Una vez que logrés tu meta de ahorro, continuá con esta importante práctica, establecé nuevas metas a corto y mediano plazo y adquirí nuevos productos de ahorro.