Solo es necesario un correo electrónico con un enlace a un sitio web fraudulento para que los ciberdelincuentes puedan adueñarse de toda tu información confidencial.
El phishing es una táctica en la que los criminales suplantan entidades confiables como empresas de pagos en línea, agencias gubernamentales o entidades financieras. A través de un correo electrónico falso, los delincuentes solicitan a su víctima que actualice sus datos confidenciales en un sitio web fraudulento. Usualmente aseguran que existe un problema con sus cuentas bancarias, una transacción o un envío. Una vez que la víctima ha entregado sus datos, los delincuentes pueden adueñarse fácilmente de todo su dinero y sus productos financieros.
¿Cómo podés evitar ser una víctima del phishing?
- Cuando recibás correos de nuestro banco, verificá que la dirección del remitente es la correcta.
- No hagás clic en enlaces dentro de tu correo a menos que sepás donde te llevarán.
- Recordá que en Scotiabank jamás solicitaremos tus datos confidenciales.
- Al entrar a un sitio web, verificá que cuenta con certificados de seguridad: revisá que la dirección empiece con “https://” y que hay un candado al lado izquierdo de la barra de navegación.
- Mantené actualizado tu sistema de antivirus.
- Jamás revelés tus contraseñas.
- No proporcionés tu información confidencial por medios no autorizados.
- Si recibís algún correo sospechoso, comunicate directamente con nuestras líneas de atención y verificá la información que recibiste.